jueves, 10 de septiembre de 2009

Día de la no obligación


Ayer tarde declaré día (bueno tarde porque por la mañana tuve que ir a trabajar claro) de la no obligación, que consiste, como su propio nombre indica, en hacer solo aquello que me apetezca.

¡Es genial! lo suelo hacer después de períodos de gran actividad aunque esa actividad en este caso se debiera a las vacaciones.

Lo pasé en casa trasteando con mis cosas, y, créanme se me pasó la tarde rapidísimo y disfruté un montón.


Las cosas más sencillas son las que te dan más alegría y satisfacción. Peeero... mi dieta se resintió un poquitín... ya lo verán...



Mi dieta de miércoles:
7,30 h.- Sandwich pan integral, pechuga pavo. Infusión.
11,30 h.- 2 ciruelas y 1 pera.
14,30 h.- Pollo asado y papas al horno. Heladito (ven, primera pasada)
18,30 h.- Pan con chocolate (como cuando éramos pequeños para merendar. Segunda PASADA)
21,00 h.- Sandwich jamón serrano. Batido soja

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola, muy interesante el post, felicitaciones desde Chile!